Amenaza K: Tinelli y Pergolini críticos con el Gobierno

En la sociedad de la información, los formadores de opinión son cruciales. Muchas veces, ellos no eligen serlo, pero no dudan sobre su poder ni sobre su capacidad para influir en la perspectiva de su audiencia. Tal es el caso en la Argentina del popular Marcelo Tinelli y de Mario Pergolini, las voces más influyentes de los dos canales de TV más importantes del país. Tanto en “ShowMatch” y “C.Q.C”, las críticas contra el Gobierno se están convirtiendo en la parodia y el show de sendos programas.

En las facultades de Comunicación Social del país, a la hora de estudiar los efectos de los medios sobre las decisiones de la población, los programas de estudio incluyen la presencia de Carlos Menem en el programa de Marcelo Tinelli a días de presentarse en 1995 a su reelección. Tampoco pasa inadvertido el papelón que protagonizó el ex presidente Fernando De la Rúa en el show de Tinelli cuando equivocó el nombre de la esposa del conductor, cuando quiso salir del estudio por una puerta de utilería, ni cuando un “infiltrado” le recriminó en vivo y en directo fallas de su gestión. El Marcelo Tinelli de Canal 13 es muy distinto al Marcelo Tinelli que tuvo como invitado en abril de 2004 al presidente Néstor Kirchner en el lanzamiento de su radio, 1030 AM de Radio del Plata, en el Hipódromo de Palermo.Tinelli se parodió a sí mismo el martes, tras el éxito de su segmento “Bailando por un sueño”, en el que los participantes del concurso de baile no eran ignotos, sino los dobles de los “políticos más importantes del país”. Néstor Kirchner y la primera dama, Cristina Fernández, fueron ridiculizados por los cómicos que encarnaban al matrimonio presidencial. En una presentación previa al baile, para conocer a los candidatos de la competencia, Cristina se la vio paseando por los shoppings y se parodió a un colérico Kirchner. El jurado estuvo integrado por el dúo Fernández, quien calificó los movimientos del matrimonio presidencial con un indudable “10”. En el caso de “C.Q.C”, en la entrega del debut Gonzalo Rodríguez logró ingresar a la cocina de la Casa Rosada, en pleno boicot contra el consumo de carne, y filmar que los cheffs presidenciales habían servido mollejas. Esa misma noche, Rodríguez había conseguido las declaraciones del matrimonio presidencial, con un estilo entre jocoso y sobrador, donde afirmaban que no había vestigio alguno de carne vacuna en ningún agasajo de la Casa de Gobierno. El miércoles, en el segundo programa de “C.Q.C”, el mismo notero indagó semanas antes del acuerdo de Luis Barrionuevo con el Kirchnerismo, si este pacto era posible. Funcionarios de la talla del jefe de Gabinete, Alberto Fernández, quienes habían negado esta posibilidad, “murieron por su boca”, cuando en la misma noche de la emisión, la diputada y esposa de Barrionuevo, Graciela Camaño, asumía como vicepresidenta tercera de esa Cámara.


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